14/10/2015. Hoy miércoles, 14 de octubre se celebra el Día Mundial de la Normalización que bajo el lema “Normas: el lenguaje del mundo” los tres organismos de normalización internacionales – la Organización Internacional de Normalización (ISO), la Comisión Electrotécnica Internacional (IEC) y la Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU) — nos hacen reflexionar sobre el papel imprescindible que juegan las normas a nivel mundial.

En este sentido, las normas internacionales:

1. Hacen posible la comunicación entre países y el funcionamiento de la tecnología: imagina un mundo donde tu tarjeta de crédito no entre en el cajero o donde no encuentres la bombilla correcta para tu lámpara. Un mundo sin prefijos telefónicos o simplemente un mundo sin acceso a internet.

2. Nos ayudan a entender información importante a pesar de las barreras idiomáticas. Por ejemplo, existen símbolos gráficos estandarizados que nos aportan información rápida y clara sin necesidad de traducciones (instrucciones de limpieza en prendas de vestir, indicaciones para evacuaciones de emergencia, instrucciones para dispositivos eléctricos…)

3. Son necesarias para compatibilizar unas tecnologías con otras. La tecnología necesita de estándares para comunicarse. ¿Te has preguntado alguna vez si tu ordenador sería capaz de enviar documentos a una impresora si fuese de un fabricante diferente? Las normas técnicas tienen por objeto fijar unas reglas y parámetros comunes a todos los productos de tal forma que estos funcionen independientemente de su procedencia. Archivos estandarizados como MPEG y JPEG te permiten compartir vídeos y fotos con otras personas a pesar de tener de dispositivos diferentes.

4. Nos ayudan a conseguir exactamente lo que queremos: simplemente imagina cómo de difícil sería gestionar productos procedentes de proveedores internacionales si no tuviésemos estandarizadas las unidades de medida.

Sin la normalización, actividades rutinarias tales como hacer una llamada telefónica, navegar por internet o usar una tarjeta de crédito cuando viajamos sería mucho más complicado o incluso imposible.